BUZON REAL

Toda una vida tan modosita, con su pelo lacado ajeno a las inclemencias meteorológicas, ejerciendo de mujer de jefe de estado en un discreto segundo plano, luciendo su cara tipo pan de pueblo (con todo mi respeto hacia los panes, la señora reina y las caras en general) y ahora, para una vez que se le ocurre opinar va y la lía.

La reina ha decidido hablar sobre todo un poco, que si el aborto no mola, que si los gays que se casan no son matrimonios, que las familias actuales con un hijo de cada madre son un sin Dios… las típicas opiniones que generalmente importan un pimiento dependiendo de quien vengan pero claro, si uno lleva una corona, vive de los sueldos de su país y tiene una descendencia de dudoso coeficiente intelectual pues no puede permitirse comentar este tipo de cosas

Y a mi que me da pena la mujer, reconozco que no acaba de hacerme gracia la idea de pagarle parte de su consumo desorbitado de laca mientras yo no puedo comprar los zapatos de la foto de abajo pero es que la ves ahí, con sus 70 años, calladita, rodeada de hijos, nietos, marido y para una cosa que se le ocurre hacer por si misma (con ayuda de una escritora se entiende) van y la ponen de vuelta y media

Pero el horno no esta para bollos reina, las hipotecas ahogan a los pobres ciudadanos de a pie y tú vives en un palacio, si es que ya son ganas de tocar las narices… que tienes chofer, servicio doméstico, actimel del de marca, a los hijos colocados en puestos que por mucha carrera, master o neurona que nos gastemos la plebe no llegaremos ni a arañar y siendo sinceros (tu y yo lo sabemos) ninguno de ellos es precisamente Karpov… lo sé, te duele pero a mi madre también le fastidia que no tenga novio y lo acepta como puede.

Lo peor de todo es que esos zapatos siguen fuera de mis pies.