Fases

Mantener la calma, ese es el primer paso para superar una ruptura.

Haruko y yo estamos superando dos, una cada una, se entiende. No lo llevamos del todo mal, puede que el hecho de pasar por esto a la vez nos ayude a sobrellevarlo con más dignidad.

Dentro de la crisis hay varias fases, nosotras estamos en la inicial y hemos llegado a la conclusión de que no es buena idea por ejemplo salir de fiesta. El sábado a punto estuvimos de ponernos monas y adentrarnos en el mundo nocturno pero empezó a llover y aquello basto para ir al videoclub y cambiar el alcohol por las palomitas.

- Bueno, el primer paso es plantearnos salir, ya estamos mucho mejor, esta claro
- Sí, totalmente, yo ya estaba casi convencida, vamos, porque llueve que si no....
- Es verdad, yo también, además tengo ganas ...
- Sí, sí, lo mismo que yo, ya noto que me apetece más ir de fiesta...
- Para el próximo o el siguiente ya estaremos mucho más animadas....
- En dos semanas o tres ya fijo, así tendremos más ganas
- Sí, y que el alcohol en estos casos lo mismo no nos va bien...


Pues claro que no va bien, qué pasa si sales con el corazón hecho pate a buscar un poco de ilusión perecedera? Que acabas a las 05.00 de la mañana después de haber comprobado horrorizada que todos esos tíos que te hablan son idiotas, o huelen raro o van tan borrachos que no saben si hablan contigo o con uno de los chinos que venden artículos imposibles que sólo los más pringados acaban llevando encima, en definitiva, la dramática evidencia de que todos ellos no son EL.

Y te vas a casa en taxi mientras tus ojos empiezan a desaparecer detrás de un mar negro de lagrimas que caen por barbilla y ropa dejando el rastro del rimel que horas antes aplicabas mientras fantaseabas con la idea de ser la reina de la noche....

Y amaneces con dolor de cabeza, con falta de sueño y de ganas, con un domingo repleto de nada, con un cansancio infantil que no deja lugar al pragmatismo de los días previos en los que buscabas ocupaciones que imposibilitaran pensar en ESO.

- Mejor lo dejamos para otro momento.
- Mejor, sí... vamos a por una peli?
- Sí , buena idea, y compramos palomitas
- Ok

Por que todo tiene su momento y el nuestro esta por llegar.

lavativas

He comprado un detergente de los pijos, normalmente siempre he ido a por el barato, al de la marca del hipermercado, ese que no lava bien pero que resulta exageradamente más económico que los de los anuncios, pero lo que son las cosas, el otro día decidí tirar la casa por la ventana, hacer un exceso doméstico y comprar los de la tele, esos que cunden más de lo que cuestan, de los que no los cambias ni por tres de los sin nombre, de los que blanquean más que los cirujanos de Michael Jackson (que en paz descanse), de los que evitan esa situación tan desagradable que se crea cuando cuelgas la ropa en el tendal y compruebas que siguen las manchas con las que la introdujiste en la lavadora, son menos intensas vale, pero siguen ahí, decides abortar misión, coger la pelota de ropa que habías metido en tu cesto con forma de pollo y volver a repetir la operación del lavado atentando contra el desarrollo sostenible.

Pero resulta que mi exceso ha sido provechoso, mi nuevo detergente pijo lava como dicen en el anuncio. Después de mi primera colada experimenté un éxtasis indescriptible y comencé a descolgar las cortinas del piso, a quitar las fundas de todo aquello que las tuviera y casi estuve tentada de manchar deliberadamente algún que otro mantel para comprobar que mi nueva adquisición no defraudaba.

Y todo esto no es que tenga demasiada importancia, pero me ayuda a desviar la atención del hecho de que estoy realmente triste.