miércoles, septiembre 08, 2010

sensaciones


Alguna vez has tenido la sensación de sostener algo bonito entre tus manos mientras va tornándose cada vez más desagradable? Como intentando proteger de cualquier modo un gran tesoro del que depende nuestra felicidad y los simples actos para lograrlo atentan contra otros principios básicos para nuestra estabilidad, importantes para respetarnos y cuya ausencia o trasgresión concluyen en la sensación de que lo que tratamos de mantener no es tan bonito como pensábamos, no a ese precio.

Y ahora, después de pocas horas de sueño siento que no doy más de mi, que lo que trato de mantener vivo a toda costa no es lo que imaginaba o lo que hubo un día, me he quedado sola con mi idea de lo que debería ser y por un momento he creído que iba a ser así pero esta mañana sentada delante del ordenador en mi oficina con ganas de llorar y con la sensación ya familiar de que no va bien, no puedo dejar de ignorar que esto no era lo que quería, que no se esta arreglando y el tesoro del que hablo hace tiempo que se me ha ido de las manos.

martes, mayo 04, 2010

conjeturas

Escuché lo de esas pulseras que ayudan a mantener el equilibrio, dicen que te la pones y puedes tocarte la punta de la nariz con el dedo sosteniendote sobre una sola pierna. Es bastante hortera pero teniendo ese poder bien puede permitirse la apariencia que le parezca.

Y pensando me pregunté si no existiría también una pulsera, collar o lo que sea que equilibre desde dentro, que mantenga todos los pensamientos bien coordinados sostenidos sobre sus bases cualesquiera que sean.

Que aunque no fuera bonita yo la llevaría, y podría imaginar que me toco la punta de la nariz sostenida sobre una sola pierna mientras el resto de elementos desestabilizadores se mantienen a raya.

lunes, abril 05, 2010

Silogismos

No quiero mentirte, no significas nada para mí, la verdad es que sólo pretendo utilizarte para sentirme menos desesperada los días en los que reúno optimismo suficiente para pensar que otro puede hacerme sentir algo parecido a sentir.

Para alguna noche en la que quiero compartir mi cama, no porque me atraigas físicamente que no lo haces, sino porque hay veces que el cuerpo necesita recibir alguna caricia más íntima que otra.

No te va a doler, a mi sí, porque seré más consciente de lo que ya no tengo, porque tu cuerpo no es el suyo, ni tu olor el mismo, ni besas igual, ni quiero que lo hagas.
Y te irás y me prometeré a mi misma que no volveré a llamarte, que no pasara más, que solo me recuerdas lo triste que me siento, que eres una sombra desdibujada de lo que tuve.

Y si supieras… criticarías mi actitud, puede que incluso me tacharas de zorra, de algo peor, tendrías tu parte de razón, al fin y al cabo me importan bien poco tus sentimientos y aunque no quiero hacerte daño estoy segura de que te voy lo voy a hacer y aunque a mi también me duela sé que seguiré.

Durará poco, seguramente lo sospeches todo, lo más probable es que no me creas cuando te digo que tengo superada mi ruptura pero vas a estar detrás, paciente, queriendo creer que yo soy especial y pensando que podemos llegar a algo, que es cuestión de tiempo, pero no lo va a ser, yo te diré que tú tenías razón, que no estoy preparada, me dejarás tranquila y en poco tiempo olvidarás todo esto, entenderás que nunca fui para tanto, que por alguna razón siempre nos atraen las almas errantes, las que parece que no tienen nada que perder porque ya lo tienen todo perdido.

Y si te preguntas por qué, estabas en el sitio adecuado en el momento menos indicado.

lunes, enero 11, 2010

Reality Bites



Estábamos sentados en la terraza de aquel local, era verano y hacía calor así que no fuimos los únicos que decidimos pasar la tarde mirando al infinito con un café en las manos tratando de ignorar el jaleo que formaban los de las otras mesas, porque siempre son los de las otras mesas, nunca nosotros.

Tú estabas ojeando el periódico del día, te gusta saber qué pasa por el mundo, a mi el mundo me preocupa lo mismo que le preocupo yo a él, siempre he sido un poco “pues si tu no me quieres yo tampoco te quiero” y justo cuando te estaba juzgando secretamente, decidiendo si tu interés era real o era una de esas cosas que a veces se hacen porque quedan bien, porque dan un aire de formalidad a quien las ejecuta como quien anota en una agenda sus citas o los que guardan todos los tickets con sus gastos y después los revisan, sonó mi movil.

Tú no te diste cuenta, lo tenía en silencio encima de la mesa y vi el parpadeo, acerqué la vista para identificar al llamante y cuando lei tu nombre me quede perpleja. Ahi estabas y yo no sabia si responder o no, te observé tratando de entender qué clase de dimensión extraña habías visitado pero no había nada que delatara tu ausencia, ni mirada perdida ni apariencia estática, tus ojos seguían las frases de la noticia que leías, estabas ahí bordando tu actuación “hombre que lee periódico en tarde soleada” (porque al final sentencié que no era un interés real y lo que hacías era actuar) así que lo mismo estabas atrapado en algún agujero del tiempo y lo que yo quise entender como un desdoblamiento era algo mucho más grave… puede que estuvieras llamando desde el futuro para alertarnos de algo importante, quien sabe si relacionado con lo que habías leído.

Pero si alterar lo que se supone que va a pasar en un futuro puede traer trágicas consecuencias (lo decía Michael j.Fox en Regreso al Futuro) no estaba bien que yo descolgara e inflingiera las normas del destino y todo lo demás… por otro lado eso es algo que tú también sabías y aún así ahí estabas tratando de comunicarte conmigo… ya te estaba descolgando cuando paro de sonar.

Y allí me quedé con cara de decepción, sabiendo algo que tu no sabías pero que tu otro yo sí, ahora los tres colgábamos de nuestro destino, quien sabe si un camión volcado en la carretera, una explosión de gas, un incendio en el coche…

Nos fuimos unos minutos después, tú sacaste el movil de tu bolsillo mientras nos acercábamos al coche y dijiste

- Se me ha vuelto a desbloquear… el próximo lo compro con tapa, se pulsa el de rellamada solo…

Así que el misterio se resolvió y su resolución fue decepcionante, como cuando te explican el truco que utiliza un mago y ya no hay nada de especial en él e incluso sientes que es un farsante y te cae mal de manera inconsciente, lo mismo.

Más tarde pensé que al menos, durante unos segundos, sentada en la terraza aquel día soleado hubo magia y por si acaso no te pregunté si era yo quien estaba en rellamada.

viernes, enero 01, 2010

QUE NO CUNDA EL PANICO


Porque todos de vez en cuando tenemos nuestras crisis...la crisis según Albert Einstein:

"No pretendamos que las cosas cambien, si siempre hacemos lo mismo. La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países, porque la crisis trae progresos. La creatividad nace de la angustia como el día nace de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar 'superado'. Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias, violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones. La verdadera crisis, es la crisis de la incompetencia. El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones. Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia. Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto, trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora, que es la tragedia de no querer luchar por superarla."